SAN PABLO.- Colombia pasó la primera prueba sin Radamel Falcao y la pasó bien. La victoria 3-0 sobre Grecia en el debut del Mundial que se perdió el “Tigre” fue tan gratificante para los “cafeteros” que al menos pasan las horas tranquilos mientras esperan el segundo duelo en el grupo C.
El rostro de alivio del técnico José Pekerman fue evidente tras el partido, aunque, siempre exigente, dice que hay cosas por mejorar porque por momentos no le gustó el funcionamiento de su escuadra cuando perdió el control de la pelota. Sin embargo, algo que tiene especialmente contento al entrenador argentino es la capacidad goleadora que su equipo demostró con tremenda ausencia en la delantera. Es que hasta un defensor, Pablo Armero, se hizo presente en el marcador, y eso dejó en paz al DT.
Claro que la mala noticia no tuvo nada que ver con aquel partido y con la buena performance que Colombia demostró tras largos años sin participar de una Copa del Mundo. Lo que pasó fue que durante la última práctica: el delantero Carlos Bacca salió caminando de la cancha mientras sus compañeros seguían entrenándose, al parecer molesto por una contractura. El cuerpo médico hará un seguimiento de la lesión hasta el lunes y si Bacca no evoluciona, se le realizarán estudios para descartar o confirmar una lesión más seria. En caso de una rotura fibrilar serían unos 10 días de recuperación. Ya prende velitas José... (Especial)